sábado, 28 de febrero de 2009

ARIES

Es un signo de FUEGO. Como tal, su naturaleza es impulsiva, dinámica, intuitiva, activa, repentina... Solo en el agua encuentra la calma, la paz, la serenidad, la racionalidad que no le otorga su naturaleza. Sin embargo, puede que a largo plazo no le llene completamente. Por eso, necesita de otra llama que avive la suya, que le haga expresar lo que tanto tiempo ha reprimido, el propio fuego que tanto ha intentado ir apaciguando, extinguiendo, ahogando con el agua. Así, juntos, serán tan fuertes que podrán calentar el agua hasta llegar a evaporarla sin que pueda apagar sus propias llamas.

viernes, 27 de febrero de 2009

UN ALMA AL AIRE











Un alma al aire, desolada,
empujada por vaivenes,
que van y que vienen,
que no se detienen,
pero que no la mueven.

Una pluma mojada,
trasladada, perdida,
asustada, frustrada,
suspendida en el aire,
un alma desgastada.

jueves, 26 de febrero de 2009

Hola a todos.

Al fin, después del estrés emocional sufrido durante la época de exámenes en cualquier facultad, me dedico a escribir un rato. Esta vez, no me inspira nada en particular, no me mueve nada especial. Simplemente creo que mi firme compromiso al abrir este blog fue el de dejar constancia de lo que sucede a mi alrededor y que de alguna manera me afecta. Quizás, por eso, el continuo aburrimiento de estos días y la gran dejadez que me gobierna guían hoy mis manos dejando plasmar algunos pensamientos.

Me siento crítica, crítica con lo que veo a mi alrededor, crítica conmigo misma. Ciertas redes sociales o comunidades virtuales por las que todos nos hemos dejado caer no solo cumplen la función de mantenernos en contacto a pesar de la distancia o la falta de tiempo, sino que, a veces, producen también un efecto un tanto depresivo en aquellos que, al compararse con el resto, encuentran inferioridad en sus vidas con respecto a la de los demás.

Pondré un ejemplo para que se vea más claro. Pongamos por caso que hay lugares en Internet en los que puedes poner en común tus fotos ante un público, normalmente tus amigos y conocidos. Ellos pueden verte y tú puedes verlos a ellos. Hay fotos de todos los momentos: fiestas, viajes, amigos, en clase, de copas, cosas raras... No importa cuando todos llevamos una vida parecida. En cambio, cuando algunos viajan más que tú, salen más que tú, tienen más conocidos que tú, o sencillamente tienen en sus cuentas más movimiento que tú, te molesta. Te molesta (te diré la causa) porque tú tienes los mismos derechos y obligaciones que el resto, pero por cualquier motivo a ti no te llegan esas oportunidades o, quizás, si te llegan, tengas miedo de aprovecharlas. No entiendes porqué los demás parecen disfrutar de lo poco que tienen y tú, sin embargo, que no te puedes quejar de tu situación, no eres feliz sino tienes un objetivo que te mantenga ocupado todo el día. No es más feliz quien más tiene, sino el que menos necesita.

Sin dudar, cualquiera con dos dedos de frente diría que es un pensamiento falto de coherencia, vano, superficial y carente, por supuesto, de autoestima hacia uno mismo. No obstante, ¿quién me podría negar que alguna vez no le han hecho sentirse así este u otros motivos? Cada uno vive como quiere, como puede o como le dejan. Nadie es más feliz por hacer más viajes, salir más, conocer más gente, si realmente no está a gusto consigo mismo. Y, normalmente, esto suele surgir al juzgar subjetivamente nuestro aspecto físico, buscando comparaciones con los modelos arquetípicos de la sociedad. Todo dilema personal suele hallarse la mayoría de las veces en este punto de partida. No nos gustamos porque al mirarnos al espejo lo que vemos no refleja lo que somos: personas dulces, alegres, simpáticas, amables, sociables... o todo lo contrario. Solo observamos palidez, cansancio, mala cara, mal humor, desgana... agravado por la impotencia de no poder solucionarlo, ya fuese por cuestiones de ignorancia ante lo que nos pasa o de cómo intervenir, por falta de dinero, por cuestiones biológicas o por el gran miedo que sentimos ante el cambio.

El miedo al cambio se convierte en el gran enemigo de todo éxito, un posible éxito que no sabemos cómo mantenerlo sin que el entorno nos cambie también a nosotros. Existe el miedo a que podamos perder, lo que consideramos, nuestra verdadera esencia, lo que tanto hemos defendido, la diferencia que nos ha marcado y nos ha costado conservar a pesar de los años.

Nuestra mente se mueve así. Mi mente se mueve así. Intento todo para no caer en el círculo vicioso que me lleva a no sentirme merecedora de hacer todo lo que me gusta. Poco a poco voy dejando de hacer aquellas pequeñas cosas que me hacen sentirme bien, lo cual me lleva a reprocharme constantemente mi comportamiento, haciéndome parecer una completa inepta social. Trato de evitarlo, pero cuanto más lucho contra mí, más batallas voy perdiendo. Necesito un cambio para poder reflejar al mundo lo que verdaderamente soy, lo que verdaderamente siento. La cuestión es qué tengo que hacer y por dónde empezar.

martes, 17 de febrero de 2009

EPOCA DE EXÁMENES

Sin respirar,
sin comer,
sin dormir,
sin salir,
un sin vivir.

Estudiar,
pensar,
recordar,
imaginar,
soñar,
sonreir,
anhelar,
volver a estudiar.
Céntrate!!!

DIPLOMADA EN ABSTRACCIÓN, CONCENTRACIÓN Y MOTIVACIÓN

viernes, 6 de febrero de 2009

FEBRERO

Hoy 6 de febrero
me doy cuenta
de que te quiero.


No sé si alejarme o dejarme querer.
Este mes siempre recuerda la inmensa necesidad de amar

¡Qué triste para aquellos descorazonados sin oportunidad!

No quisiera lastimarte...

No voy a enamorarme
pues ya he perdido la ilusión contigo.

¿¡Por qué no vivir al margen
mejorando día a día protegidos del dolor
hasta el momento de decir aquí estoy yo!?

Porque sufrir es vivir,
te mantiene alerta,
te despierta.

Por eso, aunque las aguas sean turbulentas,
dejo que la corriente me lleve y
que el viento me transporte allá donde debe.


Observaré orgullosa el rastro que voy dejando.
Y quizás, al final, podré descansar entre unos brazos.
Ese final solo significará un comienzo más.

Estoy segura de lo que quiero.
No voy a exigir más de lo que tengo.

Voy a dibujar una senda incierta
y en ella voy a encontrarme a mí misma.
Seré consciente de mis límites y mis progresos.

Una etapa acabó, una puerta se cerró.
Quedó tras de mí lo que me contaminaba.

Una ventana abierta llena hoy de luz mi percepción.

Ha vuelto a resurgir el ave fenix!